El servicio de espionaje de Israel podría estar detrás de la muerte del exlíder palestino. Uno de los guardias personales era un agente israelí infiltrado que envenenaba el café instantáneo que Arafat tomaba a diario.
De acuerdo a información del periódico libanés Ad Diyar, el Mossad israelí infiltró a un espía en la guardia personal de Yasser Arafat, quien mezclaba el café original con otro que estaba adulterado con plutonio, y así la bebida envenenada deterioró la salud del mandatario de manera progresiva.
La Inteligencia de Israel conocía que Yasser Arafat solía empezar el día con una taza de café instantáneo con leche.
La investigación periodística asegura que el agente del Mossad habría ejecutado sus órdenes a cambio de una gran suma de dinero y de obtener asilo en Occidente. Tras culminar su misión, el espía habría viajado a Canadá y, posteriormente, a Estados Unidos. Durante ese proceso, los servicios de inteligencia israelíes le habrían ayudado a someterse a varias cirugías plásticas.
El histórico líder palestino, Yasser Arafat, murió el 11 noviembre del 2004 en el hospital militar Percy en Clamart, situado cerca de París, capital francesa. Los médicos informaron que ingresó al centro de salud tras un repentino deterioro de salud, pero las causas de su muerte no han sido aclaradas hasta la fecha.
Según especialistas franceses el Departamento de Protección Radiológica tomaron datos en bruto de las muestras de orina del palestino durante su hospitalización, y afirmaron que no encontraron rastros de polonio en la ropa de Arafat ni sospechas de que haya ingerido esta sustancia tóxica, como se dijo a finales de marzo.
Sin embargo, expertos suizos solicitados por la viuda “apoyan razonablemente la hipótesis del envenenamiento con polonio 210” debido a los síntomas que presentó antes de fallecer.
Telesur