Emiliano Bajo Iglesias nació en Miranda de Ebro en el año 1889. Era sastre de profesión, siendo elegido concejal de su localidad en el año 1931. Fue destituido en el año 1934, y repuesto en su cargo después del triunfo del Frente Popular en el año 1936. En ese momento es elegido alcalde. Bajo era miembro de Izquierda Republicana. El 23 de mayo de 1936 sufrió un atentado cuando un militante de Acción Popular le hirió con un cuchillo.
Cuando se produjo la sublevación militar intentó defender la ciudad de los golpistas. Envió a un concejal a Eibar para que trajera armas, pero fue interceptado por las tropas sublevadas. Mientras tanto la ciudad quedó, momentáneamente controlada por los ferroviarios, sindicatos y militantes del frente popular.
En este sentido, conviene recordar la importancia de Miranda de Ebro como núcleo ferroviario del norte peninsular. Estos trabajadores se hicieron fuertes en la Casa del Pueblo. Pero la Guardia Civil, proveniente de Burgos, y con la ayuda de un grupo de falangistas se hizo con el control de la ciudad.
Emiliano Bajo y los concejales republicanos fueron detenidos. El alcalde sufrió un consejo de guerra, y se le condenó a la pena capital. Fue fusilado el día 18 de septiembre de 1936.
Su mujer, Natalia Quecedo Barcina también fue procesada en el juicio sumarísimo junto a su marido, ella sería condenada a la Prisión de Saturrarán, donde estuvo encarcelada 7 años.
Hoy, en honor a los miembros de la corporación, víctimas de la represión franquista, Miranda de Ebro ha dedicado un parque nuevo, y que lleva el nombre de su último alcalde democrático. También, algunas calles llevan el nombre de los concejales asesinados.
Eduardo Montagut
@Montagut5