Al grito de Felipe González tortura y asesina y fuera fascistas de la universidad, un grupo de estudiantes de la Universidad de Alicante abucheó al ex mandatario español, al que también le recordaron que durante su gobierno se llevó a cabo una política de terrorismo de Estado. González participaba en un foro del Círculo de Montevideo, al que también asistió el empresario mexicano Carlos Slim.
El ex mandatario español recobró protagonismo en los últimos meses a raíz de su anuncio de que defendería a los presos políticos en Venezuela, en alusión a Leopoldo López, pero sobre todo tras las declaraciones en las que afirmó que en el Chile de Augusto Pinochet se respetaban más los derechos humanos que en la Venezuela de Nicolás Maduro. La afirmación indignó a los colectivos de izquierda españoles, los cuales le recordaron su supuesta vinculación con el asesinato, las torturas y las desapariciones de 28 personas presuntamente ligadas a ETA en la década de los 80, cuando el Estado español financió a los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL).
González acudió en Alicante a la 22 reunión del Círculo de Montevideo, que congregó a ex presidentes y empresarios de España y América Latina, entre ellos el colombiano Belisario Betancur, el chileno Ricardo Lagos y el uruguayo Julio María Sanguinetti. Además estuvo el magnate mexicano, quien en meses recientes ha realizado importantes operaciones empresariales en España y se ha convertido en el socio de referencia de la constructora FCC.
Antes de entrar a la sala de conferencias, un grupo de estudiantes recibió a González con el grito de Felipe González tortura y asesina y fascista, a lo que él respondió con un saludo y una sonrisa. Dijo a sus anfitriones que ya estaba acostumbrado a ese tipo de recibimientos y que lo mismo me pasó en Caracas.
Los estudiantes también exigieron la expulsión de los empresarios de la universidad, por su fomento de las políticas neoliberales en América Latina, la destrucción de lo público y la liberalización y globalización del mercado.
Después, ya en el interior de la sala y cuando todos los ponentes habían iniciado el debate, los estudiantes se levantaron de sus asientos y mostraron diversas pancartas, entre ellas una que rezaba: Fuera empresarios de la universidad y la La universidad no se vende, se defiende. También había un cártel que decía: Ayotzinapa vive. Faltan 43, en alusión a los estudiantes normalistas desaparecidos hace un año en Iguala.
Armando G. Tejeda | La Jornada
Fuente: www.jornada.unam.mx