Apostatar es más sencillo de lo que parece. Lo importante es tener un poquito de paciencia y seguir los siguientes pasos:
1. Consigue tu partida de bautismo.
Averigua en qué parroquia te bautizaron preguntando a algún familiar cercano. Una vez lo sepas, ve allí (o llama) y pide una copia de tu partida de bautismo. Si te preguntan para qué, di que te vas a casar. Puedes decir que es para apostatar, pero si quieres evitar posibles sermones e incluso alguna traba, mejor decir que te casas. Si te la dan en mano quizá te cobren algo (como mucho 10-15€) y si te la mandan por correo será contrareembolso, pero como mucho serán 20€ y el fin justifica los medios.
2. Haz una fotocopia compulsada de tu DNI.
Ve a la comisaría de policía nacional más cercana con el DNI y una fotocopia y te lo hacen sin cita previa, en 2 minutos. Si no tienes comisarías cerca de casa, también te lo pueden hacer en cualquier notaría por menos de 5€.
3. Descarga y rellena este formulario.
Es un formulario de solicitud de apostasía y es el más completo de los que hay en Internet, ya que tiene en cuenta las últimas consideraciones legales derivadas de la sentencia del 2008 del Tribunal Supremo, además de dejar claro que no quieres el asesoramiento de ningún representante eclesiástico. Imprímelo y rellénalo.
4. Presenta o envía la documentación.
Estos tres documentos (partida bautismal, fotocopia compulsada de DNI y formulario de apostasía) debes llevarlos en persona o enviarlos por carta certificada y con acuse de recibo a la diócesis que te toque según tu lugar de bautismo. Para saber cuál es la diócesis correcta, usa este buscador que te dirá cuál corresponde según tu municipio y provincia de bautismo (rellena ambos campos). Una vez sepas cuál es la correcta, busca en esta lista de diócesis la dirección correspondiente y envía el sobre certificado o llévalo todo en persona. Si lo envías por correo dirígelo al obispo o a la vicaría general. Si lo llevas en persona pregunta por el responsable de apostasías e intenta dejarlo hecho esa misma mañana.
5a. Si puedes hacerlo en persona:
Intenta resolverlo ese mismo día, o al menos sal de allí con una cita en firme para resolverlo en los próximos días. Se quedarán con una copia de la documentación que llevas y, en la mayoría de diócesis, te darán una Declaración de abandono de la fe católica como la que hay abajo. En muchas diócesis también te mandan la declaración por correo postal al cabo de unas semanas. Si tardan más de un mes, llama a la diócesis y dales un toque de atención (los teléfonos también aparecen en la lista mencionada).
5b. Si no puedes hacerlo presencialmente:
Sigue todos los pasos hasta el 4 y una vez mandes la carta, haz un seguimiento del tema con la diócesis. Cuando tengas el acuse de recibo, llama para comprobar que ya tienen la documentación y que te van a responder. Quizá te envíen un formulario para rellenar antes de enviarte la declaración de abandono final. Rellénalo y envíalo en ese caso. Al final te enviarán un certificado parecido al que hay a continuación. Puedes hacerlo todo a distancia y no tienen por qué ponerte problemas.
Y finalmente, obtén algo parecido a este certificado y disfrútalo.
Fuente: apostatar.org