Gallardón y cuenta nueva
huérfano el ministerio con aroma
apolillado, camisa longeva
que es sus grises vestidores asoma.
Hagamos Gallardón y cuenta nueva,
el canguelo a perder las elecciones
abre una grieta de luz en la cueva
de un gobierno de antiguas vocaciones.
Fachardón, con el rabo entre las piernas,
dijo adiós a sus fieles indultados,
a rupestres que adornan su caverna.
el canguelo a perder las elecciones
abre una grieta de luz en la cueva
de un gobierno de antiguas vocaciones.
Fachardón, con el rabo entre las piernas,
dijo adiós a sus fieles indultados,
a rupestres que adornan su caverna.
Tienden a extrema diestra las raíces
del ministro recién desalojado
que tizna de sangre las cicatrices.
Borja Angosto Rubio