Hace unos años, la Sociedad General de Autores de España sembraba el terror por España, intentando cobrar pasta a peluquerías que tenían puesta la radio o a residencias de ancianos que tenían la tele puesta para que los abuelos no se murieran de aburrimiento.
Nadie entendía todo aquello, pero la ley les amparaba, o al menos eso decían ellos. Posteriormente se supo que la SGAE era un nido de corrupción y de reparto de pasta bastante bien montado, los directivos de la misma dimitieron e incluso fueron acusados de delitos. Pasado un tiempo, aquellas movidas dejaron de salir en la prensa.
Ahora parece que la Asociación de Editores de Diarios Españoles (AEDE), que agrupa a los mastodontes de la prensa española como El País, El Mundo, La Vanguardia, ABC, La Razón, entre otros muchos, quieren montar su propia versión del canon con la ayuda del gobierno y en concreto el ministerio dirigido por José Ignacio Wert (el especialista del gobierno en montar líos donde no los hay). En este caso, la AEDE tendrá el derecho a cobrar una cantidad de dinero a cualquier página que se dedique a enlazar sus contenidos. Un pago por link que afectaría a páginas como Google News o Menéame, aunque también a Facebook, Twitter e incluso a blogs personales.
El Congreso aprobó un anteproyecto de reforma de la Ley de Propiedad Intelectual que comienza a definir, aunque de forma tremendamente ambigua, ese canon y nos coloca, una vez más como líderes en poner límites al desarrollo la red y de la libre circulación de la información.
En Facebook se ha creado el evento: No les enlaces, no al #CanonAEDE
Juanjo Villalva
Fuente: www.vice.com