Si hay un episodio que manifieste más claramente lo que ha representado realmente para España esta dinastía que lleva afligiendo nuestra nación durante más de trescientos años es la ruborizante situación del Peñón de Gibraltar.
Comenzaron los andares por nuestras tierras de esta familia, que ha arrasado -poco a poco- la dignidad de España, cual impenitente caballo de Atila, cediendo esta roca que, como piedra gigante, se nos ha colado, desde entonces, en los riñones de nuestra nación...
Felipe V, el primer Borbón, aquel rey que murió loco y reinó dos veces (la segunda, tras el fallecimiento de su hijo, el casi desconocido Luis I de España) sólo dejó una estela de ignominia hacia nuestro país, cediendo Gibraltar y Menorca a los ingleses (luego recuperada esta última por su descendiente Carlos III), perdiendo todas las posesiones europeas de España y granjeándose un odio eterno de buena parte del pueblo catalán hacia el resto de los españoles.
Tras él, todo fue un rodar sin fin hacia el precipicio, con la pérdida absoluta de toda la España americana... sin que ninguna de estas naciones recuerden actualmente con orgullo la presencia española en su tierra, a diferencia de muchas naciones que formaron parte del Imperio Británico y que aún rememoran con agrado haber pertenecido a él... y que incluso conservan a la reina de Inglaterra como Jefe de Estado, a pesar de su independencia...
En fin qué vamos a descubrir sobre esta dinastía que no ha sido otra cosa que un auténtico veneno para nuestra nación... ¿Podemos recordar, quizás, aquel sainetero tirapelos entre Carlos IV y su hijo Fernando VII que condujo a que, ridículamente, Napoleón les aprisionase en Bayona para enseñorearse por nuestro país...?
¿Podemos recordar la corrupta restauración y la alternancia pactada entre partidos, que tanto nos recuerda a la situación actual...?
¿Podemos recordar que nuestro actual monarca fue colocado, a dedo, por un golpista dictador que no hizo otra cosa que bajar a España del tren de la modernidad...?
Ésta es la España borbónica: la España del chuleo británico sobre nuestra tierra, la España de la cobardía total, de la sumisión humillante, del descrédito internacional pleno, de la corrupción rampante, de la pobreza absoluta...
¿Es necesario, pues, seguir recordando, amigos...?
Fuente: elfiloloco.blogspot.com.es