En Sinaloa (México) se cultiva una planta endémica poco conocida, se trata del Papachi (Randia echinocarpa), cuyo uso como alimento y medicina era muy extendido por los indigenas antes de la llegada de los españoles. Es un árbol que crece muy alto con hojas en forma de crucecitas. De flores blancas. Hay dos tipos de fruto, el de la sierra parece un limón o guayaba, liso y no es medicinal y el de tierra caliente que tiene picos y es utilizado como medicamento. La planta con uso medicinal crece en lo caliente, en las lomas, cerros y conserva todo el tiempo sus hojas y florece entre los meses de junio-julio. Su aspecto parece como una trufa de chocolate y tiene un sabor amargo y dulce a la vez.
Su distribución es en la sierra del norte de Sinaloa, mayormente en los municipios de Sinaloa, Choix y el Fuerte. La corteza del árbol de papachi tiene uso medicinal, se toma cocida y “serenada” (se pone a enfriar durante la noche a la intemperie) para el dolor de o infecciones en los riñones. Se toma por las mañanas en ayunas durante nueve días.
Se han realizado varios estudios científicos en la Universidad Autónoma de Sinalóa, demostrándose su actividad antioxidante y antimutagénica de los extractos del fruto de papachi de los cuales la fracción hexanica fue la que presento mayor actividad antimutágenica seguida la fracción clorofórmica, es por ello que en el presente trabajo se realizo la evaluación y caracterización de la actRividad antimutagénica de la fracción cloroformica del fruto de papache (FCP). También se le atribuyen propiedades anticancerígenas.