“Si me pregunta por el blanqueo, no tengo ni torta idea”, así respondió al Juez la princesa Inés de Borbón-Dos Sicilias, duquesa de Siracusa y prima del rey Juan Carlos
Inés María de Borbón-Dos Sicilias, de 76 años es hija del infante Alfonso de Borbón-Dos Sicilias, fallecido en 1964 y que durante tres años de la historia de España, entre 1904 y 1907, fue el heredero al trono de España, hasta que nació, ya rey, su primo Alfonso XIII. Es, por tanto, prima en segundo grado de don Juan Carlos.
El juez investiga tres ingresos en su cuenta de Suiza en 2008 y 2001 de un total de 69.000 euros por orden de Martín -uno de ellos de una empresa de Costa Rica-, movimientos de los que ella dice no tener conocimiento. “No lo sé, señor juez, no lo sé, es una sorpresa, lo mismo que tener que venir aquí”, le dice sobre su citación en la Audiencia Nacional dentro del caso Púnica.
Según Inés de Borbón-Dos Sicilias, Martín controlaba todo su patrimonio en ese país, proveniente de la herencia de su padre, el infante Alfonso de Borbón-Dos Sicilias y Borbón, muerto en 1964. Ese año, su padre les dejó un dinero en Suiza a ella y sus dos hermanos, aunque la princesa no sabe concretar la cantidad. “¿A cuánto ascendió la herencia?”, le pregunta el juez, a lo que contesta la princesa de las Dos Sicilias, de 76 años: “Ni idea, es que antes nos enseñaban a no interesarnos por el dinero ni preguntar”.
Responde con un “mis labores” y “colaboradora de una revista” a la pregunta sobre su profesión, afirma que no tiene ningún patrimonio, solo sus “cinco hijos”, y asegura al juez que no sabía si el dinero en metálico que le traía a España Martín respondía a operaciones de blanqueo.
Dice que tenía “total confianza” en el gestor de Suiza, que llegó a ser su amigo, y que le pedía dos o tres veces al año que le trajera dinero de su cuenta, en cantidades de 5.000 a 10.000 euros, que le daba en billetes de 50 euros. Martín, que también gestionó patrimonio en Suiza del exconsejero madrileño Francisco Granados, iba con cierta periodicidad a su casa y le entregaba el dinero, tras lo que ella firmaba un papel, aunque dice no tener ninguna documentación con los movimientos de su cuenta suiza ya que nunca hablaba con el gestor “de cosas de dinero”.
Cuando en 2012 el Gobierno aprobó la amnistía fiscal, sus hijos, según relata, le aconsejaron regularizar, cosa que ella hizo, aunque no sabe concretar la cantidad de dinero, que estaba en Suiza porque su padre tuvo que salir de España. “Era infante de España y entonces, cuando lo echaron en la República, se tuvo que ir a Suiza a vivir.
Fuente: Kaosenlared.net