¡Feliz Navidad! ¿Para quien? ¿Para el obrero desempleado? ¿Para los parados que ya no tienen prestación? ¿Para los dependientes que todavía esperan las ayudas ya concedidas y no pagadas por falta de presupuesto? ¿Para las familias a quienes les han cortado la luz y el agua y están amenazadas de desahucio? ¿Para los niños a los que ni siquiera les abren los comedores escolares, para que hagan una comida caliente al día? ¿Para los inmigrantes que se ahogan o son linchados cuando tratan de pasar una valla?
A veces, tenemos la sensación de que nos roban la felicidad y que las navidades sólo son buenas para ellos: los banqueros, los ricachones "patriotas" con cuentas en Suiza, los políticos corruptos y mafiosos que nos han robado los ahorros, el trabajo, la pensión, las viviendas, con recortes en la sanidad y la educación pública y no conformes con ello nos impregnan con contratos basura y temporales que rozan la esclavitud y obligan a la gente decente a exiliarse fuera de nuestros país.
Te propongo un ejercicio de reflexión: estas navidades piensa en las 650.000 familias que han perdido su casa por no poder hacer frente a su cuota hipotecaria, en los cortes de suministros indiscriminados, en los desahucios de alquiler, en el bloqueo del Partido Popular a la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) hipotecaria con más de 1.600.000 de firmas, en las entidades financieras rescatadas con el dinero de todos y que los banqueros usureros no quieren ceder los pisos vacíos para que sean vivienda social. Gracias a las políticas neoliberales del Partido Popular, el Portal de Belén también sería DESAHUCIADO.
Eco Republicano