La historia sucedió en el barrio de Triana de Sevilla. Un hombre dejó un maletín encima del techo de su coche y olvidándose por completo del maletín, se subió al vehículo y lo arrancó, por consiguiente la maleta terminó cayéndose al suelo y en ese momento, un inmigrante nigeriano que se dedica a vender pañuelos en las calles, se percató del suceso y ante la imposibilidad de devolverlo al dueño, lo entregó a la policía.
Felizmente la Policía pudo localizar al dueño, la sorpresa fue que dentro del maletín había más de 3.000 euros en metálico y cheques por valor de 13.000 euros.
Por su parte, el dueño del maletín recompensó al inmigrante con 100 euros por su gesto de honradez.