La dimisión de Gallardón, el fraude masivo de las tarjetas “negras” de Caja Madrid-Bankia y la “crisis del ébola” han dado un fuerte empujón a una tendencia electoral que venía acentuándose desde las últimas elecciones europeas.
Las últimas encuestas independientes, no sesgadas por el régimen, apuntan a falta de 7 meses de las decisivas elecciones locales del 31-M, que se producirá un “subidón” de “Podemos”, un auge de “Ciudadanos” y de “Vox”, un severo hundimiento del PP, un constante deterioro del PSOE y un estancamiento o ligerísima subida de los demás partidos, sobre todo UPyD e IU, con una excepción: el candidato “magenta” por la Comunidad Valenciana, el actor y diputado Toni Cantó, se hunde en su circunscripción “arrastrado” por el PP. Todos los nacionalistas, salvo ERC, se estancan o descienden.
Tras “limpiar” la encuesta de Demoscopia de sus habituales sesgos en la interpretación de los datos, la web Electomanía ha llegado a conclusiones diferentes para este mes de octubre de 2014: Podemos es ahora mismo la tercera fuerza política española con 5 millones de votos, concretamente 5.057.000 votos.
Esto significa que en 5 meses ha adquirido 3,8 millones de respaldos, que esperaban a que pudiera obtener representación parlamentaria. Ahora que esto se ha confirmado en Estrasburgo, la tendencia sigue siendo al alza y creciente, pues la formación de Pablo Iglesias parece inmune (e incluso estimulada) por los desmesurados y habituales ataques que recibe a derecha e izquierda. Si en lugar de comicios locales y autonómicos fueran unas elecciones generales, Electomanía les da hoy una proyección de entre 70 y 81 escaños.
Fuente: Espía en el Congreso